Falleció este lunes 12 de abril, a los 85 años, una gloria del fútbol lobense: Jorge Horacio Castellanos.

Fue sin dudas Jorge un notable futbolista que vistió diferentes camisetas de la Liga, que tuvo su época de esplendor en el Lobos Athletic Club, que prolongó su actividad hasta que el físico se lo permitió, y que nunca se separó del fútbol.

Dueño de un físico privilegiado y de una técnica particular, Jorge se convirtió en un baluarte del fútbol lobense, compartiendo equipos locales y selecciones con otros formidables futbolistas de su época.

Desde chico, en su Salvador María, se enamoró del fútbol a primera vista, y esa relación se mantendría hasta el fin de su existencia porque, ya retirado de cualquier función en una cancha, no había posibilidades de entablar un diálogo con Jorge que no pasara por el fútbol.

Así lo vivió, así lo transmitió, así lo enseñó, así lo honró con una enorme trayectoria reconocida por todos.

Cumplido su recorrido como jugador, incursionó en la dirección técnica pasando también por diferentes equipos, siendo ideólogo de aquel Deportivo Italiano que fue un boom en la Liga, y llegando a la conducción de selecciones lobenses, juveniles y mayores.

En la década del 80, y como un merecido reconocimiento a lo que significó dentro del fútbol lobense, le llegó el momento de presidir la Liga, y lo hizo con la misma pasión y dedicación que caracterizaron toda su vida.

Recibió el premio “Enzo Ardigó”, de Radiodeportes ´76 al Deportista del Año en 1978, y también el premio “José Salgado” del Club Salgado, en reconocimiento a su trayectoria.

Su profesión de chapista también lo ubica en un sitio privilegiado en la historia local, y fue Jorge un cristiano comprometido con su fe, participando activamente de la vida parroquial junto a toda su familia.

Jorge se fue físicamente, mientras se juegue al fútbol en un una cancha o en cualquier espacio, seguirá vivo por todo lo que dejó.

Que descanses en paz, querido Jorge.

C.A.J.