La Escuela Primaria N° 21 “General Manuel Belgrano” de Salvador María celebró el domingo su centenario, con un acto pleno de emociones.

Sus actuales autoridades recibieron a ex alumnos, ex docentes, ex miembros de cooperadora y a las autoridades que se hicieron presentes encabezadas por el Director de Educación del Municipio, Carlos Jorge, quien obsequió a la directora una foto de los primeros años de labor educativa de ese establecimiento emblemático de la zona rural.

Hubo descubrimiento de placas y entrega de medallas a ex alumnos que cumplían 25, 50 y hasta 75 años de su egreso.

Mabel Delía de Barbieri recibió la distinción como integrante de la promoción 1948, de 75 años de finalizar la Primaria, y se la entregó Carmen Rusconi, “La Negra” otra ex alumna de aquellos años.

Los egresados 1998 recibieron las medallas de manos de Adriana Guillenea, directora al momento de terminar los estudios: Iván Brun, Jorge Echeverría, Raúl Fernández, Martín Notta, Matías Sala, Claudio Seuchuk, María Barberini, Bárbara Castellanos, Marcela Delía, Verónica Figueredo Meneses, Cristina Figueroa, Emma García, Lucrecia Guilenea, Pamela Parodi, Valeria Pastorino, María Rosa Ratto y Adriana Wilhjelm.

Y la querida Mabel Galli, directora “eterna” de la escuela 21, entregó las medallas a los integrantes de la promoción 1973, de Bodas de Oro: Eduardo Beain, Adriana Bossi, Roberto Manuel Mayssán, María Marta Millán, Emir Moscoloni, Liliana Orsi y Oscar Pierini.

Claudia Soria, actual presidenta de la Cooperadora, entregó reconocimientos a Angelita Malvestiti y Mabel Biroccio, en nombre de todos los que integraron la entidad en este siglo.

Y familiares de Irma Biroccio y Nilda Barbieri, también recibieron presentes en memoria de quienes fueron incondicionales en la escuela.

PALABRAS DE LA DIRECTORA, FABIANA MASSACCESI

“Cuando alguien cumple cien años, es un hecho extraordinario, que se celebra con agradecimiento y enorme alegría ese milagro de vida. Pero cuando la que  cumple cien años es nuestra escuela, es aún más extraordinario”.

“Cada uno de nosotros forma parte viva de esta querida escuela que nos ha reunido en cada acto y ceremonia, en cada festejo importante del pueblo, de la comunidad, que nos invitó a participar, a crear, a ser parte, a alcanzar sueños y estimular nuestro crecimiento personal”, remarcó la docente.

“En especial, la escuela de pueblo cumple una función central: convoca,  comunica y reúne, ayuda, integra, quienes estamos en la escuela hoy tenemos el privilegio de revisar y revivir a través de fotos, relatos y testimonios, pedacitos de historia de otros y la nuestra también, para hilvanarla y dejarla como testimonio vivo de esta hermosa celebración”.

“En mi caso, la escuela primaria Nº 21, Gral. Manuel Belgrano, representa pertenencia, orgullo, compromiso, amor, fue mi primera casa de estudios, años más tarde volví a ella como maestra. Fue también  la primera escuela de mis hijos y hoy me encuentra como directora llevando adelante este homenaje vivo a la educación de los niños, a sus maestros y auxiliares, a los miembros de la asociación cooperadora”.

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