Un grupo de personas iniciaron desde ayer, domingo, un intento de usurpar un terreno ubicado en la calle Belgrano, a orillas del Canal Salgado, generándose una situación de conflicto que ha requerido de la intervención policial y la formación de una causa remitida a la justicia.
En el informe policial se consigna que el domingo se recibieron varios llamados de vecinos de calle Belgrano entre 125 y 127, dando cuenta de la posible toma de esos terrenos por parte de unas cincuenta personas, mostrando preocupación y alarma por este hecho.
“Se desplazó un móvil policial que, a su arribo, pudo constatar la veracidad de lo informado advirtiéndose la existencia de varias personas residentes de este medio, que estaban en el interior del predio realizando demarcaciones de los terrenos los que, entrevistados, no aportaron documentación que acredite la propiedad, motivo por el cual se dio inicio a las actuaciones penales por el delito de Usurpación en grado de tentativa, con intervención de la UFIJ 2 de Saladillo a cargo de la Dra. Patricia Hortel.
Agrega el parte de la Policía que “hoy, lunes 24, se presentó en la seccional policial un ciudadano de Lobos, manifestando ser propietario del predio en cuestión, quien aporto documentación del mismo”.
“Asimismo se individualizo a las personas que se encontraban en el lugar, y dichas actuaciones labradas fueron remitidas a sede judicial a los efectos de resolver la situación procesal”, completa el parte.
Mario Chirone y César Petraglia son los voceros de la gente que pretende instalarse en ese terreno, y dijeron a los medios que “nosotros no queremos tener problemas con nadie, tenemos necesidad de contar con un techo para nuestras familias y sabemos que esto no pertenece a Jorge Luis Spinosa y Gastón Quintana como ellos dicen, por eso nos vamos a quedar aquí”.
Mientras que ciudadanos de origen boliviano argumentaron que “el señor que dice ser propietario de este predio nos ha vendido los lotes a varios paisanos, y nosotros queremos edificar aquí porque para eso hemos pagado”.
Una situación muy delicada cuyo desenlace no será fácil de presagiar.