Fue entronizada en la mañana de este jueves, en la Plaza 1810, esquina de Buenos Aires y Salgado, la primera placa que se colocó en el cementerio de Malvinas, en memoria de Horacio José Echave, con la leyenda “Soldado argentino sólo conocido por Dios”.
La mamá del héroe, Nélida Montoya de Echave, decidió donar la placa al pueblo de Lobos por el acompañamiento incondicional a los veteranos y familiares de los caídos durante estos 42 años, y el Intendente dictó el decreto para colocarla en ese lugar céntrico, entregándole a la mamá de Horacio una copia de dicha disposición en el transcurso del emotivo acto.
Veteranos de Malvinas de Lobos y de otras ciudades, las madres de Sergio Azcárate y Jorge Luis Bordón, la hermana de Juan Domingo Rodríguez, el gabinete municipal en pleno, delegaciones de Policía y Bomberos, y vecinos de la comunidad, acompañaron a Nélida, sus hijos, yernos, nuera y nietos, en tan conmovedor encuentro.
Entre los presentes estuvo el Coronel Esteban Vilgré Lamadrid, jefe de los cuatro héroes lobenses caídos en Malvinas, quien hizo entrega de un diploma firmado por el actual titular del Regimiento 6 “General Viamonte”, y pronunció muy fuertes conceptos, evocando la valentía de sus dirigidos, y recordando los últimos momentos de la vida de Horacio Echave que compartió cuando se estaban replegando por orden de sus superiores.
El acto comenzó con la intervención de Uriel Giácomo interpretando magistralmente el poema de Adrián Maggi, y luego la Orquesta Escuela ejecutó el Himno cantado por Eduardo Napolitano.
El Intendente y la familia de Horacio descubrieron la estructura que contiene la placa, que fue bendecida por el Párroco Luis Mena, y luego se colocaron ofrendas florales.
EL MENSAJE DE ANALIA ECHAVE
En nombre de la familia, fue Analía Echave, hermana del héroe, quien pronunció estas palabras:
“Desde diciembre de 2017 cuando se nos confirmó que los restos de Horacio se encontraban en el cementerio Argentino de Darwin comenzamos de cierta forma a cerrar una etapa, esa que nos anuló la esperanza de verlo regresar en cualquier momento.
Hoy queda entronizada la placa “Soldado Argentino sólo conocido por Dios” en esta plaza donde muchas veces Horacio supo jugar, caminar durante su niñez y juventud; placa que mamá decidió donar en forma de agradecimiento a los vecinos de nuestra ciudad, por acompañarnos durante estos 42 años, en especial durante los años que buscó la realización de los ADN para saber si Horacio se encontraba en las Islas.
Está placa que tiene un valor histórico y sentimental muy fuerte ya que cubrió el cuerpo de nuestro Héroe por muchos años y desde hoy se encuentra en nuestra plaza para que al verla recordemos con orgullo la entrega de nuestros héroes.
Hoy es un día muy especial para nuestra familia y no queremos dejar de agradecer a todas las personas que hicieron posible que este día llegara. En primer lugar a Julio Aro, Gabriela Coccifi y Jose Raschia por su lucha incondicional para devolverle el nombre a nuestros soldados caídos sin identificar.
A la comisión de familiares que tuvo en custodia hasta el día de hoy la placa, a las autoridades municipales, a los Veteranos locales y Veteranos de otras localidades hoy presentes. A todas las personas que trabajaron en la construcción del monumento, donando la totalidad del mismo. Y por último, y no menos importante, a todos los vecinos que nos siguen acompañando manteniendo viva la memoria de nuestros 649 héroes”.
GRACIANA LAMARCHE
Y luego habló Graciana Lamarche de Macchi, que fue maestra de Jardín de Infantes de Horacio Echave y Sergio Azcárate, en el Jardín 903 “Grumete Pedro Alonso”.
Recordó que “siempre fuiste un niño tímido y fuerte a la vez, nadie quería demostrar las emociones de abandonar, por unas horas, la mano de mamá y papá. Tiempo vivido intensamente como tu maestra jardinera”.
También evocó que “tu papá, que era carpintero, fabricó la camita y los banquitos del rincón de la casita, y Horacio se encargó siempre de recordarles que su papá era el autor de esa maravilla”.
En la parte final, dijo: “el recuerdo cariñoso de la señorita para los dos pequeños alumnos que dieron su vida por la patria, como el Grumete Alonso, defendiendo las Islas Malvinas: Horacio Echave y Sergio Azcárate, besos al cielo por ellos”.
La Marcha de Malvinas, interpretada por la Orquesta Escuela y Napolitano, marcó el cierre del emotivo acto.
