Impresionante, impactante, es la repercusión alcanzada por la soberbia obra del maestro Fernando Sancho, ese retrato de Lionel Messi al que solamente le falta hablar, realizado en pocos días luego de la consagración argentina en Qatar, donde el astro brilló con todo su talento.
El cuadro luce en la céntrica vidriera de Kevingston, y han sido ya innumerables los potenciales compradores que se han contactado con Fernando para pedirle precio.
Pero el maestro de las artes plásticas tiene un sueño, que Messi vea su obra y, si le gusta, obsequiársela.
“Todo lo que hago me sale de improviso, y era lógico que pintase a Lionel Messi porque para mí es un ídolo, me puse a pintarlo como podía haber pintado a cualquier otro pero este era su momento, comencé a pintarlo al otro día del título, y en 6 días lo terminé”, contó Fernando.
“Se me ocurrió que podía mostrarlo al público ya que personalmente lo había disfrutado enormemente, hablé con Fabián González y encantado me cedió la vidriera y enseguida empezaron a caerme los mails y mensajitos, y aparecieron las nietas mujeres de los 13 que tengo, y me pidieron manejarme las redes sociales, y así se fue dando todo, les dije que sí, se reunieron, subieron en todas las redes y a la hora me vinieron a contar que ya tenía 300.000 visualizaciones de todo el mundo, a la tarde que tenía un millón, a la noche 4 millones de visitas, y hoy ha superado los 6 millones, con 700.000 mensajes”, siguió relatando.
Y aclara que “yo no hice todo eso, lo hizo Messi sin dudas, con cualquier otro cuadro no habría pasado nada”.
Fernando ha recibido mensajes de diferentes lugares del planeta elogiando su creación. Y contó que lo llamó el “Flaco” Rubén Cousillas desde España (está con Pellegrini en el Betis) para pedirle que le venda el cuadro, y cuando el maestro le explicó que su sueño era regalárselo a Messi, tuvo como respuesta del roqueperense, que iba a hacer gestiones con Pesella y Rodríguez, que forman parte del plantel español.
“Sabemos que ya la foto ha llegado al entorno de Messi, he tenido contestación, así que veremos qué nos depara el destino, me conformo con saber que él lo vio”, remató.
Lejos de conformarse con esta obra formidable, Fernando ya está creando un nuevo cuadro que será seguramente otro impacto: el abrazo de Julián Alvarez y Messi en uno de los partidos del Mundial.