Con la presencia del ex árbitro internacional Javier Castrilli, la Agrupación de Arbitros de Lobos realizó esta semana en el anexo del Club Rivadavia (salón de La Fraternidad), un encuentro en cuyo transcurso los integrantes de la misma recibieron la nueva indumentaria otorgada por el SADRA, sindicato al que pertenecen.
Los jueces recibieron un conjunto completo de camiseta, pantalón y medias de la nueva marca elegida por SADRA.
Castrilli felicitó a la agrupación conducida por Diego Bobadilla por su crecimiento constante, y alentó a los árbitros a seguir capacitándose y tomar con responsabilidad la profesión que, dijo, “es difícil, tiene momentos duros, pero si la encaran con
responsabilidad, les va a dar muchas alegrías”.
Además de Castrilli, estuvieron en el encuentro el Secretario General de la seccional Buenos Aires, Norberto Wolkkopf, quien fue clave en la formación de la agrupación lobense y la ha acompañado desde siempre; y Raúl Merlino, Secretario General de la seccional Noroeste.
El “Sheriff” habló también con los medios antes de su charla-debate, y como siempre fue directo, categórico y claro en sus conceptos.
En diálogo en vivo con Canal 4, Castrilli dijo que “me parece fantástica la organización arbitral que hay en Lobos, siempre que se generan espacios de capacitación y formación, nos ponemos contentos, porque muchas veces se ve truncada una carrera porque no tienen a mano la oportunidad de capacitarse”.
EL ARBITRAJE ARGENTINO Y EL VAR
Preguntado por el arbitraje argentino hoy, sostuvo: “creo que el arbitraje sudamericano todo está en crisis”.
“En Argentina vemos la irregularidad en el rendimiento y la disparidad de criterios de los árbitros en distintos partidos, parece como que existe algo que no funciona y es el conjunto de directrices emanadas por los cuerpos orgánicos, se confunden muchos conceptos, y los árbitros pierden el rumbo, muchos de ellos prefieren transitar el camino de la conveniencia y la comodidad, y prestan oído a recomendaciones de personas que no son idóneas en el arbitraje y se creen dueños de la verdad diciéndoles cómo tienen que dirigir los árbitros”.
“Y en cuanto al VAR, fue categórico: “es imposible que un Mercedes Benz ande bien si se lo damos a manejar a un mono”.
“Yo puedo traer la mejor maquinaria pero si se lo doy a manejar a quienes no saben, no pueden o no quieren, el resultado será lo que tenemos con el VAR, que como herramienta es fantástico”.
“Vino para aportar transparencia, seguridad, certeza, tranquilidad, confiabilidad en el sistema, y por estar mal implementado despierta todo lo contrario”.
