Con el templo colmado, se celebró anoche la Vigilia Pascual, con el anuncio de la Resurrección.
El Párroco Luis Mena bendijo el fuego nuevo en la calle y marcó el Cirio, para luego ingresar en el Templo a oscuras y continuar con la ceremonia que incluyó el rito de la bendición del agua y la renovación de las promesas bautismales.
Junto con Mena concelebraron los padres Roberto Giecco y Gustavo Scapino.
En su Homilía, Mena recordó los días vividos en la Semana Santa y sus respectivos signos y mensajes, y luego dijo que “pregunto cómo llevar la resurrección al otro. La pandemia nos alejó, hoy estamos volviendo, nosotros hoy celebramos esta fiesta, pero hay muchos afuera que ven luces que se prenden y se apagan, velas que se encienden, tres curas, y la resurrección tiene que hablar, con la presencia, el estar, el mirar al otro porque es mi hermano, el salir de mi comodidad para servir a otros”.
“Los invito a pensar, a veces no hay que pensar en grandes cosas, sino estar, salir un poco más porque hay mucha gente que necesita encontrarse con la luz de la resurrección, en medio de un mundo que no nos da seguridad”, agregó el sacerdote.
“La resurrección de Cristo fue para todos, está muy bien que celebremos esta noticia, y el lunes cada uno de nosotros volverá a su rutina familiar y de trabajo, pero lo vivido en estos días no puede quedar archivado, donde esté tengo que transmitir alegría del resucitado”, concluyó.
También en las misas del Domingo de Pascua hubo masiva participación de fieles.