El Estudio de Formación Integral de Actores que lleva adelante Verónica Zugasti, presentó su cierre de año con cuatro obras cortas, todas surgidas de las clases desarrolladas a lo largo del año.
El espectáculo tuvo lugar en la noche del domingo en la sala de la Biblioteca Sarmiento, donde funciona esta actividad escénica, y fue acompañada por medio centenar de personas que aplaudieron sostenidamente el desempeño de las cuatro actrices.
Las cuatro obras dejaron su mensaje relacionados con temas siempre candentes, como la violencia de género y sus consecuencias devastadoras, la igualdad de derechos, la libertad y los lazos de sangre familiares con sus bemoles.
La conclusión más importante y valiosa de lo que vimos, a nuestro juicio, es que Verónica tiene material humano muy interesante entre sus manos para seguir adelante y lograr progresos.
La presentación en público siempre tiene sus desafíos y máxime para quienes la enfrentan por primera vez como fue el caso de tres de las actrices del domingo, a excepción de Viviana Dabué que ya había tenido experiencias sobre las tablas años atrás.
Andrea Chialva afrontó quizás la parada más brava con ese unipersonal en el que encarnó a una mujer víctima de violencia de género en “Gritos del silencio”, y lo resolvió con acierto, llegando bien a las situaciones límites.
Camila Millán fue la protagonista de “Señorita Julia”, la segunda propuesta en la que mostró condiciones para la actuación que podrá ir perfeccionando con la guía de la directora.
Alma Garay, en “El mundo de las abejas” se desenvolvió con acertados desplazamientos y muy claro parlamento, mostrando aptitudes escénicas interesantes.
Y la dupla de Andrea Chialva y Viviana Dabué, en “Aire de París”, se complementó notablemente para mostrar la relación de dos hermanas muy diferentes que descubren, en el reencuentro, que las unen más cosas de las que creían.
Guillermo Gagiotti manejó las luces con su reconocido oficio, y Mariana Lacoste fue la colaboradora inmediata de Verónica Zugasti, quien se mostró feliz al término de la función, expresando que “estoy muy emocionada, es un placer enorme poder compartir con Lobos lo que trabajamos todo el año con las chicas”.
“Quiero seguir haciendo esto, dándole cultura y teatro a Lobos, que la gente se anime a venir a las clases, así que en febrero vamos a arrancar otro año y espero que sumemos más integrantes al estudio”, añadió.