El 84% de las muertes por cáncer de pulmón se deben al consumo de tabaco.
La población fumadora tiene un mayor riesgo de desarrollar un caso severo y morir por COVID-19.
En 1987, la Organización Mundial de la Salud (OMS) instituyó el Día Mundial sin Tabaco todos los 31 de mayo para llamar la atención de los países hacia la epidemia del tabaquismo y sobre los efectos letales que la adicción al tabaco provoca en el cuerpo. Según la Organización Panamericana de la Salud (OPS), en todo el mundo el consumo de tabaco causa 8 millones de muertes por año; en Argentina, el 84% de las muertes por cáncer de pulmón se deben al consumo de tabaco. Desde 1979, la Liga Argentina de Lucha contra el Cáncer (LALCEC) lleva adelante el proyecto “Chau Pucho”, que acompaña a consumidores de tabaco a abandonar el cigarrillo y apunta a fomentar, en la población joven, la no iniciación en esta práctica.
“Desde que se deja de fumar, cada día hay una mejora en el estado de salud de la persona, y diez años después la posibilidad de desarrollar cáncer de pulmón se reduce a la mitad”, explicó la Dra. Cristina Gaitán, especialista en neumonología y presidente de la Unión Antitabáquica Argentina “UATA”, y aclaró que “fumar poco no reduce el alto riesgo que provoca la duración del estímulo tóxico”. A través del proyecto “Chau Pucho”, los especialistas de la organización brindan talleres de tratamiento grupal para dejar de fumar.
El cáncer de pulmón causa más muertes que cualquier otro tumor. A su vez, de todas las causas de muerte, esta enfermedad está en segundo lugar después de las patologías cardiovasculares. “El riesgo de desarrollar cáncer de pulmón no sólo está relacionado con la cantidad de cigarrillos diarios. El llamado ‘fumador social’, o sea quien fuma pocos cigarrillos por día, es también un sujeto de alto riesgo para el desarrollo de este tipo de tumores, así como de otros tipos de cáncer, como el de laringe o vías respiratorias altas, de vejiga, páncreas y mama, entre otros”, explicó el Dr. Carlos Silva, jefe del servicio de oncología del Hospital Británico de Buenos Aires y del Hospital Universitario Austral. Según informó LALCEC, en Argentina más de 15.000 personas mueren cada año por un cáncer relacionado con el consumo de tabaco. El Oncólogo agregó que la exposición al humo de tabaco ajeno en espacios cerrados -como la vivienda o un espacio de trabajo- también aumenta el riesgo de desarrollar este tipo de tumores.
Síntomas para estar alerta
Desde que el mundo está bajo los efectos de una pandemia, el término síntoma se volvió parte de nuestro lenguaje cotidiano y puede resultar útil para nombrar eso que deberíamos hacer con cualquier malestar: prestar atención. Si bien la presentación de la sintomatología depende del tipo y la extensión del tumor, algunas de las alertas a tener en cuenta respecto del cáncer de pulmón son:
- Tos persistente
- Dolor constante en el pecho, al respirar o toser
- Secreción con sangre o de color oscuro
- Ronquera o cambios en la voz
- Bultos en las cercanías de la clavícula
- Fatiga, pérdida de apetito
- Ruidos al respirar o sensación de falta de aire
- Dolores en los huesos
- Infecciones pulmonares frecuentes
La detección de un cáncer puede surgir cuando un paciente se realiza por control una radiografía o tomografía computada de tórax y se encuentra una imagen anormal, o bien mediante estudios puntuales ante la aparición de alguno de estos síntomas. La detección precoz -screening- puede ayudar a encontrarlo en un estadio temprano, cuando aún puede ser curado.
Tabaquismo y COVID-19
Según la OPS, las personas que consumen tabaco tienen un mayor riesgo de desarrollar un caso severo y morir por COVID-19. Por esta razón, un gran parte de la población fumadora se decidió a dejar la adicción en el marco de la pandemia. Para seguir fomentando este fenómeno, la Organización Mundial de la Salud (OMS) lleva a cabo desde diciembre del año pasado un programa para ayudar a 100 millones de personas en el esfuerzo por abandonar el cigarrillo.
Por otra parte, con el inicio del Aislamiento Social Preventivo y Obligatorio (ASPO), en 2020, LALCEC ha registrado una caída del 80% en la cantidad de estudios realizados para el diagnóstico temprano de cáncer y hubo un marcado descenso en el número de sesiones de quimioterapia y terapia radiante. En este sentido, desde la Institución remarcan la importancia de continuar con los controles, ya que la enfermedad avanza más allá del contexto sanitario. Cuando se detecta en estadios tempranos, el cáncer de pulmón puede ser tratado quirúrgicamente con éxito de curación en cerca del 20% de los casos.
“El cáncer no se incrementa ni decae por la presencia o ausencia del COVID, la incidencia del cáncer es la misma. El problema es que al disminuir la asistencia al médico no se detecta precozmente y consultan más tardíamente con más complicaciones”, detalló el Dr. Silva, oncólogo y coordinador del área psico-social de LALCEC. A partir de este mes los pacientes oncológicos se encuentran incluidos en el calendario de vacunación del Ministerio de Salud de la Nación para protegerse del coronavirus, dentro de la población objetivo a vacunar (POV) de entre 18 y 59 años con factores de riesgo.
El 31 de mayo, en el marco del Día Mundial Sin Tabaco, LALCEC llevará a cabo dos encuentros, virtuales y gratuitos: a las 18.30 horas, con inscripción previa, habrá un conversatorio sobre el programa “Chau Pucho”, y a las 19.00 horas, a través de su cuenta de Instagram, un especialista de la Asociación Argentina de Oncología Clínica (AAOC) explicará las claves y despejará las dudas acerca de la prevención del cáncer de pulmón.