En el recuperado e impecablemente presentado salón del primer piso del cuartel central, se realizó el sábado 1° la cena del Día del Bombero Voluntario.

Los directivos y bomberos, activos y de reserva, con sus familias, compartieron el encuentro con autoridades municipales y policiales, e invitados especiales.

El servicio de la comida estuvo a cargo de alumnos de séptimo año de la Escuela Técnica N° 1 que se ofrecieron espontáneamente, y lo hicieron de manera estupenda.

Luego del postre, se realizó el acto protocolar en el que se reinauguró el salón con un corte de cintas y descubrimiento del escudo de Bomberos Voluntarios de Lobos, momento que compartieron el presidente Matías Penacini, el jefe del cuerpo, Eduardo Jamur, secretario y tesorero de la entidad, Eduardo Anaya y Oscar Maggio.

Se entregaron presentes a benefactores de la institución, recibiendo su obsequio Patricio Rusconi, y quedando pendientes las entregas a Cristian Benítez y Fabián Gruccio que no pudieron asistir.

Y, al momento de las palabras del jefe, recibieron un banderín institucional los bomberos Ariel Ibañez, Alfredo Castel y Joel Natalini, destacados como los referentes del trabajo intenso realizado para recuperar el salón del primer piso después de 16 años.

LOS MENSAJES

El jefe, Oficial Principal Eduardo Jamur, entre otros conceptos, dijo: “agradezco a todo el personal del cuerpo activo, reserva y escuela de cadetes, con todas sus familias, y a los destacamentos de Salvador María y Antonio Carboni, por poder estar nuevamente en nuestra casa, juntos, festejando nuestro día”.

“Cuando vinimos con la propuesta de recuperar este salón, nos pusimos a trabajar a destajo, y gracias al personal del cuerpo activo se logró el objetivo”, relató Jamur.

“La cena se pudo lograr hacer con costo cero para la institución, gracias a la colaboración de la comunidad, vecinos y comerciantes”, remarcó.

Y nombró a los efectivos que tuvieron a su cargo la tarea para poner en condiciones el salón: Gastón Jáuregui, Horacio Irigoyen, Fátima Bracken, Juan Cruz Sabia, Joel Natalini, Emiliano Abalos, Ariel Ibañez, Alfredo Castel, Luciano Rodríguez, Mauro Mansilla, Patricio Briganti, Pablo Silva, Patricio González, Daniel Rey, Martín Olea y Dario Araujo, “son los que se pusieron el salón al hombro”, precisó, para luego convocar a los tres destacados.

Finalmente nombró a cada uno de los donantes que posibilitaron no generar ningún gasto para la cena, al colegio FASTA que cedió el lugar para asar los pollos, y a los asadores.

Por su parte, el presidente Matías Penacini, enfatizó que “ser bombero no se resume en aprender a apagar un incendio o rescatar a una persona, implica ser una persona íntegra y con compromiso”.

“La labor del bombero es saber combinar su vocación con el trabajo en equipo, la entrega a su servicio y el sacrificio por sus semejantes”, agregó.

“Nadie dude que estamos atravesando una etapa muy importante para las entidades de bomberos voluntarios, nunca antes habíamos logrado un consenso similar, ni marcado tanta vigencia en la Nación y en nuestras comunidades, mantengamos firmes nuestras convicciones, sigamos trabajando por los objetivos propuestos, del ideario institucional”, expresó finalmente agradeciendo a todo el cuerpo activo.

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