Tal como lo habÃamos anunciado, el Jefe Ferdinando Menestrina recibió el último adiós en su amado cuartel de Bomberos Voluntarios de Lobos.
Luego de rezado el responso en el Templo Parroquial, la unidad número 1 de la Sociedad de Bomberos Voluntarios de Lobos, el camioncito que fue el primer autobomba, se detuvo frente al cuartel central, de calle Ameghino, donde lo esperaba una formación de la actual dotación, personal de Reserva y miembros de la comisión directiva.
Como sucede en estas despedidas, el toque de sirena dominó el ambiente en medio de muestras de dolor por la pérdida de este emblema de la institución, que falleció ayer domingo a los 95 años.
Luego del sentido homenaje, el cortejo siguió hacia el Cementerio donde fueron inhumados sus restos.